Mi historia de Packard: Eileen y Gary

Eileen y Gary de Palo Alto han venido a apoyar a Packard Children’s gracias en gran parte a la larga carrera de Gary en HP. Durante los años, ellos han visto como Packard Children’s ha tenido un efecto en las vidas de sus vecinos. «Ser parte de este grupo [de partidarios] es algo muy especial para nosotros», comenta Eileen. Vea su historia de Packard aquí:

[Trasunto del video]

Gary: A nuestro vecino le dio leucemia cuando era adolescente y ahora tiene 50 años y lleva una vida viable.

Eileen: Priscilla, que vive por esta calle y tiene como cinco años, estaba sorda. Así que le pusieron dos implantes cocleares que le cambiaron la vida.

Gary: Casi cada año analizamos nuestras prioridades de donación. Nuestras prioridades los últimos años han sido educación, salud infantil y espacio abierto.

Eileen: Una de las cosas que me encanta de la historia de Gary con HP es que cuando empezó en 1956 la compañía era muy pequeña. Así que tenía una conexión especial con Dave Packard y trabajaba desde su casa.

Gary: Así que apoyar al hospital no fue una decisión difícil. La Fundación se encarga de todas las declaraciones de impuestos, nos dan nuestras declaraciones anuales; es extremadamente fácil.

Eileen: Ser parte de este grupo en verdad es especial para nosotros.

Gary: La única razón por la que pudo suceder es [porque] es un hospital financiado por donantes.

Eileen: Entrar al Packard Children’s Hospital es una sensación increíble. Se siente tan ligero y vivo y afectuoso, y eso es lo que nos encanta.

Gary: Lo que pasa cuando tienes un buen lugar es que la demanda de esos servicios cada vez se hace mayor. Y te dan ganas de abrir la cartera porque estas personas están haciendo un buen trabajo. Pero además, cuando ya no estemos, si nos queda dinero, el hospital recibirá un regalo de nuestra parte. Así que funciona en ambas direcciones, es una situación ganar ganar para los dos. El que nos podamos ir a algún lado y no nos tengamos que preocupar por la manera en la que se está gestionando el regalo y el bien que hace, nos libera para hacer las cosas que queremos hacer.